Michael y Richard Simpkin.
Michael estaba en Sydney en 1996 para hacer algunos conciertos. El hotel estaba lleno de fans de Jackson, las veinticuatro horas del día. En el último día que estaba en Sydney, fui a su hotel con un traje casual y una computadora portátil. Entré en el hotel y fui hasta el primer piso. Una vez allí me senté y trabajé en el equipo. Después de treinta minutos más o menos, uno de los guardias de seguridad de Michael revisó todo el piso, se dio cuenta de que yo estaba trabajando en el equipo y no me molestó. Unos minutos más tarde, Jackson salió de los ascensores en mi dirección, donde había unos cuantos niños que esperaban con sus padres para ir a su encuentro.
Michael alegremente firmó autógrafos para los niños y posaron para las fotos. Después de haber pasado tiempo con los niños. Casualmente me acerqué a él y le pedí una foto. Michael se limitó a asentir con la cabeza y extendió su brazo para que yo pudiera estar junto a él. Bajó las escaleras y firmó autógrafos para sus devotos fans.
Richard Simpkin Rich and Famous
Michael estaba en Sydney en 1996 para hacer algunos conciertos. El hotel estaba lleno de fans de Jackson, las veinticuatro horas del día. En el último día que estaba en Sydney, fui a su hotel con un traje casual y una computadora portátil. Entré en el hotel y fui hasta el primer piso. Una vez allí me senté y trabajé en el equipo. Después de treinta minutos más o menos, uno de los guardias de seguridad de Michael revisó todo el piso, se dio cuenta de que yo estaba trabajando en el equipo y no me molestó. Unos minutos más tarde, Jackson salió de los ascensores en mi dirección, donde había unos cuantos niños que esperaban con sus padres para ir a su encuentro.
Michael alegremente firmó autógrafos para los niños y posaron para las fotos. Después de haber pasado tiempo con los niños. Casualmente me acerqué a él y le pedí una foto. Michael se limitó a asentir con la cabeza y extendió su brazo para que yo pudiera estar junto a él. Bajó las escaleras y firmó autógrafos para sus devotos fans.
Richard Simpkin Rich and Famous
2006 - La cantante Samantha Mumba comparte su experiencia de conocer a Michael Jackson en Dubai:
El encuentro con Michael fue lo más parecido a conocer a un santo. Tenía un aura increíble. Él era muy espiritual y mágico, incluso místico... Él fue muy amable y tenía una manera increíble.
"Yo no sabía qué esperar para ser honesta, ya que leí y escuché tanto sobre él. Cuando entré en la sala él era la persona más humilde, cálida y amable que puedas conocer . También tuvo un hilarante sentido del humor. Con sus bromas me daban ataques de risa. Fue raro porque yo pensaba: 'Estoy de pie en una sala con Michael Jackson. Nadie nunca va a creer ésto ".
"Todo el mundo en el negocio de la música sabe que ha hecho historia. Pero todavía puedo verlo haciendo otro gran álbum. Me encantaría verlo actuar. Es un perfeccionista y por eso le lleva tanto tiempo sacar nuevo material. Pero yo definitivamente iría a verlo si hiciera un concierto "
El encuentro con Michael fue lo más parecido a conocer a un santo. Tenía un aura increíble. Él era muy espiritual y mágico, incluso místico... Él fue muy amable y tenía una manera increíble.
"Yo no sabía qué esperar para ser honesta, ya que leí y escuché tanto sobre él. Cuando entré en la sala él era la persona más humilde, cálida y amable que puedas conocer . También tuvo un hilarante sentido del humor. Con sus bromas me daban ataques de risa. Fue raro porque yo pensaba: 'Estoy de pie en una sala con Michael Jackson. Nadie nunca va a creer ésto ".
"Todo el mundo en el negocio de la música sabe que ha hecho historia. Pero todavía puedo verlo haciendo otro gran álbum. Me encantaría verlo actuar. Es un perfeccionista y por eso le lleva tanto tiempo sacar nuevo material. Pero yo definitivamente iría a verlo si hiciera un concierto "
The Michael Jackson I Knew...
Michael Jackson dries off after participating in swimming relay competition on the set of "Rock 'N Roll Sports Classic" which aired on ABC May 3rd 1978. Rock N'Roll Sports Classic is a reality sports show which features music superstars such as The Jacksons, The Commodores, Gladys Knight and the Pips and many more. Michael admits he is not into sports but he still participates in two categories- the 60 yard dash and swimming relay. Video links MJ on 60 yard dash.
TRADUCCIÓN:
Michael Jackson se seca después de participar en la competencia de natación relevo en el set de "Rock 'N Roll clásico deportivo" que se transmitió por la cadena ABC el 03 de mayo 1978. Rock N'Roll Deportes Classic es un reality show deportivo que cuenta con estrellas de la música como The Jacksons, The Commodores, Gladys Knight y The Pips y muchos más. Michael admite que no está en los deportes, pero que todavía participa en dos categorías las 60 yardas y el relevo de natación.
Video enlaces MJ de 60 yardas
Al principio de este video se ve a Michael corriendo la carrera de 60 yardas.
TRADUCCIÓN:
Michael Jackson se seca después de participar en la competencia de natación relevo en el set de "Rock 'N Roll clásico deportivo" que se transmitió por la cadena ABC el 03 de mayo 1978. Rock N'Roll Deportes Classic es un reality show deportivo que cuenta con estrellas de la música como The Jacksons, The Commodores, Gladys Knight y The Pips y muchos más. Michael admite que no está en los deportes, pero que todavía participa en dos categorías las 60 yardas y el relevo de natación.
Video enlaces MJ de 60 yardas
Al principio de este video se ve a Michael corriendo la carrera de 60 yardas.
March 1986 - Bubbles, Michael Jackson and Donna Ashlock in Encino: Donna then 14 years old needed a heart transplant to live. One that retrieved Donna from the verge of death and ennobled the death of her donor, his boyfriend 15-year-old Felipe Garza Jr. Felipe, who'd been experiencing severe headaches, collapsed with a brain hemorrhage that proved fatal. Some days earlier, he told his family he had had a premonition. He was going to die and he would like the girl he loved, Donna Ashlock, who he had heard needed a donor, to have his heart. After the transplant, Donna gets a phone call from Michael Jackson. He had heard that she is a big fan of his. Michael invites her to his home in Encino as soon as she is feeling better. This visit takes place on March 8th. Donna stays for dinner and watches a movie together with Michael. Donna's body rejects the heart transplant and needed another. On March 7, 1989 Donna died at the age of 17.
TRADUCCIÓN:
Marzo de 1986 - Bubbless, Michael Jackson y Donna Ashlock en Encino: Donna entonces de 14 años de edad necesitaba un trasplante de corazón para vivir. Lo que recuperó a Donna del borde de la muerte y ennobleció la muerte de su donante, fue que su novio de 15 años de edad, Felipe Garza Jr. Felipe, que había estado experimentando dolores de cabeza severos, se derrumbó con una hemorragia cerebral que resultó fatal. Algunos días antes, le dijo a su familia que había tenido una premonición. Él iba a morir y que le gustaría donarle su corazón a la chica que amaba, Donna Ashlock. Después del trasplante, Donna recibe una llamada de teléfono de Michael Jackson. Había oído que ella era una gran fan suya. Michael la invita a su casa en Encino, tan pronto como ella se siente mejor. Esta visita tiene lugar el 8 de marzo. Donna se queda para la cena y vio una película junto a Michael. El cuerpo de Donna rechazó el trasplante de corazón y necesitaba otro. El 07 de marzo 1989 Donna murió a la edad de 17 años.
TRADUCCIÓN:
Marzo de 1986 - Bubbless, Michael Jackson y Donna Ashlock en Encino: Donna entonces de 14 años de edad necesitaba un trasplante de corazón para vivir. Lo que recuperó a Donna del borde de la muerte y ennobleció la muerte de su donante, fue que su novio de 15 años de edad, Felipe Garza Jr. Felipe, que había estado experimentando dolores de cabeza severos, se derrumbó con una hemorragia cerebral que resultó fatal. Algunos días antes, le dijo a su familia que había tenido una premonición. Él iba a morir y que le gustaría donarle su corazón a la chica que amaba, Donna Ashlock. Después del trasplante, Donna recibe una llamada de teléfono de Michael Jackson. Había oído que ella era una gran fan suya. Michael la invita a su casa en Encino, tan pronto como ella se siente mejor. Esta visita tiene lugar el 8 de marzo. Donna se queda para la cena y vio una película junto a Michael. El cuerpo de Donna rechazó el trasplante de corazón y necesitaba otro. El 07 de marzo 1989 Donna murió a la edad de 17 años.
WINSTON-SALEM, N.C. - When Carlene Allen first met Michael Jackson and his brothers in 1971, it began a 38-year obsession with the singer that would include several personal encounters and trips to over 100 concerts. "I went to the concert and the man told me they would be in Winston-Salem the next morning," she said. When the group came back to Greensboro for its '72 concert, Allen got an unbelievable opportunity to deliver a cake to the Jacksons at their Winston-Salem hotel room. "I went to deliver the cake and the guard said, 'Just go on up, there's nobody there.' So I went up and I stayed," she recalled. And she took pictures. Lots of them. Michael Jackson performed in Greensboro at least six times in the 1. 970s: four times with The Jackson 5 and twice with The Jacksons. Over the years, she had several additional meetings with Michael Jackson: in Greensboro, Knoxville and elsewhere. Allen went to every Michael Jackson concert within reasonable distance. "Over a hundred, maybe more," she said. "I would do three or four a year." She even went on a trip to Los Angeles, where Michael Jackson gave her a tour of his parents' home. "I was standing outside and Michael came up and recognized me, and he invited me and another lady came in and gave me a tour of the house," she said. "People would say he's just an entertainer. He was more than an entertainer; he was a person." "I will miss him. I will miss the fun times we did have, even though they were rare times that we had a chance to see him. It was nice," she said.
TRADUCCIÓN:
[b]traducción del inglés al español
[B] WINSTON-SALEM, NC - Cuando Carla Allen conoció a Michael Jackson y sus hermanos en 1971, comenzó una obsesión de 38 años con el cantante que incluyen varios encuentros personales y viajes a más de 100 conciertos. "Fui al concierto y el hombre me dijo que estarían en Winston-Salem a la mañana siguiente"- dijo. Cuando el grupo volvió a Greensboro para sus 72 conciertos, Allen tuvo una oportunidad increíble para entregar una torta a los Jackson en su habitación de hotel en Winston-Salem. "Fui a entregar la torta y el guardia dijo: " Sólo tienes que ir para arriba, no hay nadie allí. Así que fui y me quedé ", recordó. Y ella tomó fotografías. Michael Jackson actuó en Greensboro por lo menos seis veces en los . Años 70: cuatro veces con The Jackson 5 y dos veces con The Jacksons. Con los años, presentaba varias reuniones adicionales con Michael Jackson: en Greensboro, Knoxville y en otros lugares. Allen fue a todos los conciertos de Michael Jackson a una distancia razonable. "Más de un centenar, tal vez más", dijo. "Me gustaría hacer tres o cuatro al año." Ella incluso fue en un viaje a Los Ángeles, donde Michael Jackson le dio un recorrido por la casa de sus padres. "Yo estaba fuera y Michael se acercó, me reconoció y me invitó y otra señora vino y me dio un tour por la casa", dijo. "La gente diría que es sólo un artista Él era más que un artista;. él era una persona". "Lo voy a extrañar. echaré de menos los tiempos de diversión que tenía, a pesar de que fueron pocas veces que he tenido la oportunidad de verlo. Fue muy agradable",
TRADUCCIÓN:
[b]traducción del inglés al español
[B] WINSTON-SALEM, NC - Cuando Carla Allen conoció a Michael Jackson y sus hermanos en 1971, comenzó una obsesión de 38 años con el cantante que incluyen varios encuentros personales y viajes a más de 100 conciertos. "Fui al concierto y el hombre me dijo que estarían en Winston-Salem a la mañana siguiente"- dijo. Cuando el grupo volvió a Greensboro para sus 72 conciertos, Allen tuvo una oportunidad increíble para entregar una torta a los Jackson en su habitación de hotel en Winston-Salem. "Fui a entregar la torta y el guardia dijo: " Sólo tienes que ir para arriba, no hay nadie allí. Así que fui y me quedé ", recordó. Y ella tomó fotografías. Michael Jackson actuó en Greensboro por lo menos seis veces en los . Años 70: cuatro veces con The Jackson 5 y dos veces con The Jacksons. Con los años, presentaba varias reuniones adicionales con Michael Jackson: en Greensboro, Knoxville y en otros lugares. Allen fue a todos los conciertos de Michael Jackson a una distancia razonable. "Más de un centenar, tal vez más", dijo. "Me gustaría hacer tres o cuatro al año." Ella incluso fue en un viaje a Los Ángeles, donde Michael Jackson le dio un recorrido por la casa de sus padres. "Yo estaba fuera y Michael se acercó, me reconoció y me invitó y otra señora vino y me dio un tour por la casa", dijo. "La gente diría que es sólo un artista Él era más que un artista;. él era una persona". "Lo voy a extrañar. echaré de menos los tiempos de diversión que tenía, a pesar de que fueron pocas veces que he tenido la oportunidad de verlo. Fue muy agradable",
The Michael Jackson I Knew...
Darlene Donloe with Michael Jackson... Notes on the King of Pop from the memory of a one-time tour publicist."I have never written about the brief relationship I had with Michael Jackson.
But, upon learning of his untimely death last week, I felt compelled to offer a different perspective on the Jackson I knew.
I don't need to tell you he was a genius. I don't need to tell you the impact he had on the music industry or that he was loved throughout the world.
In the spirit of full disclosure, I have nothing bad to say about Jackson. In fact, it's just the opposite. He gave me some of the most unforgettable moments of my life. And, for that, I will be forever grateful.
It was the summer of 1996 when my friend, Bob Jones (now deceased), who happened to be Jackson's publicist at Motown and then later with MJJ Productions, called me and asked what I was doing for the next six months.
He said: "How would you like to go out on tour with Michael? He needs a tour publicist."
I held the phone in disbelief as Bob continued his spiel. What did he expect me to say? "Well, Bob, I'll have to look at my schedule. Let me get back to you." Why would I want to fly around first class on a private plane for a Michael Jackson tour, visit exotic places, meet officials, eat great food and stay in five star hotels? I said yes. Duh!
About three weeks later, I was on a plane that landed in Prague, Czech Republic, the first stop on MJ's worldwide HIStory Tour.
It was a week into the tour before I officially met Jackson. Although I had accompanied him on many of his outings, no one had bothered to formally introduce us.
His handlers had warned me not to speak to the King of Pop unless he first spoke to me. Were they kidding? I played along — for about a week.
I decided the next time I accompanied him to either a hospital, orphanage or record store, I would make my ninja move. I figured the worse that could happen would be that I would get sent home.
As he perused the compact discs in the R&B section of a local record store, I started to walk toward him. The handlers were aghast. It was as if the air had quickly been sucked out of the room. Undeterred, I walked up to him and said, "Mr. Jackson, I'm Darlene. I'm your publicist on the tour."
He turned and looked me straight in the eyes. "Oh, OK," he said. "Are you going to do the whole tour?"
"Yes," I replied. "Unless you know something I don't."
"OK," he laughed and returned to looking through the CDs.
"Well," I thought, "that was uneventful." However, secretly, it was completely fulfilling.
I found out later he knew exactly who I was because he had asked, "who is the black girl?" Of course, as time went on he became more comfortable with my close proximity to him.
When fans asked the King of Pop whether they could get an autograph or take a picture with him, he'd occasionally say, "If it's OK with her," pointing to me.
It was always OK with me. Who was I to break a fan's heart?
When news broke about MJ's passing, all of the memories of the tour came flooding back. There was the night he married Debbie Rowe and I got no sleep for two days, due to endless media calls. I stuck to the party-line answer: "I have no comment on Mr. Jackson's personal life."
Being a part of Jackson's entourage was fascinating and eye-opening. I got to see the inner workings of a superstar's multifaceted, precision-like machine. I was always on call and had to be ready to accompany MJ at a moment's notice — or I'd be left behind. That wouldn't sit well.
It became clear, early on, that while he was sometimes soft-spoken, he was strong-willed and very direct when he wanted to make a point or have something done.
On concert nights, I'd watch as MJ walked from his car to a spot underneath the stage where a platform would eventually elevate him into position to make a powerful entrance.
The favorite part of my job was standing in the wings night after night, watching him hit every mark with precision and thinking how blessed I was to observe a master craftsman at work.
Because he had such a commanding presence, I think people forgot he was a man. He's been elevated to superstar status for so long, it's hard for some to look at him as a human being who puts his pants on one leg at a time.
I saw him in those pensive, quiet moments before going on stage. I witnessed him, sans television cameras, sitting, comforting and talking to a child in a hospital who was fighting a serious disease. This is the guy who, on Thanksgiving in Australia, thought it was important enough to come share a meal and celebrate with his staff and crew.
When it comes to Jackson, I can only speak my own truth. The Jackson I came to know was friendly and respectful to me. And, on those occasions when I caught his eye, he would give me that shy, childlike smile.
The following quote from Shakespeare's "Romeo and Juliet" was read recently at a friend's memorial. I think it's more than appropriate for Jackson.
"And, when he shall die, take him and cut him out in little stars, and he will make the face of Heaven so fine that all the world will be in love with night and pay no worship to the garish sun."
In gratitude, I say thank you, Michael Jackson. Thanks for the magic, the music and enough memories to hold me a lifetime. — Darlene (the black girl)"
TRADUCCIÓN:
El Michael Jackson que yo conocí...
Darlene Donloe con Michael Jackson ... Notas sobre el Rey del pop a la memoria de una publicista de la gira History.
"Nunca he escrito acerca de la breve relación que tuve con Michael Jackson.
Pero, al enterarme de su muerte la semana pasada, me sentí obligada a ofrecer una perspectiva diferente del Michael Jackson que yo conocí.
No necesito decirles que era un genio. No necesito decirles el impacto que tuvo sobre la industria de la música o que era amado en todo el mundo.
No tengo nada malo que decir acerca de Jackson. De hecho, es todo lo contrario. Me dio algunos de los momentos más inolvidables de mi vida. Y, por eso, voy a estar eternamente agradecida.
Era el verano de 1996, cuando mi amigo, Bob Jones (ya fallecido), quien pasó a ser el publicista de Jackson en la Motown y más tarde con MJJ Productions, me llamó y me preguntó qué estaría haciendo en los próximos seis meses.
Él dijo: "¿Te gustaría ir de gira con Michael ? Él necesita un publicista de gira".
Yo sostenía el teléfono con incredulidad y Bob continuó su perorata. ¿Qué esperaba que dijera? "Bueno, Bob, voy a tener que mirar a mi agenda. Permíteme, ya vuelvo contigo." ¿Por qué iba yo a querer volar en primera clase en un avión privado para una gira de Michael Jackson, visitar lugares exóticos, reunirse con funcionarios, comer buena comida y hospedarme en hoteles de cinco estrellas? Le dije que ¡Sí!. Duh!
Unas tres semanas más tarde, estaba en un avión que aterrizó en Praga, República Checa, la primera parada de su gira mundial History.
Pasó una semana en la gira antes de que oficialmente conociera a Jackson. A pesar de que lo había acompañado en muchas de sus salidas, nadie se había molestado en presentarnos formalmente.
Sus controladores me habían advertido, que no hablara con el Rey del pop a menos que primero me hablara él. ¿Me estaban tomando el pelo? Eso hice alrededor de una semana.
Decidí que la próxima vez que lo acompañara a la tienda o un hospital, orfanato o grabar, me gustaría hacer "mi movimiento ninja". Me imaginé que lo peor que podría suceder sería que me mandaran a casa.
A medida que examinaba los discos compactos en la sección de R & B de una tienda de discos, empecé a caminar hacia él. Los controladores se horrorizaron. Era como si el aire hubiera sido rápidamente absorbido de la habitación. Sin inmutarme, me acerqué a él y le dije: "Señor Jackson, soy Darlene. Yo soy su publicista en la gira."
Se volvió y me miró fijamente a los ojos. "Oh, bien", dijo. "¿Vas a hacer todo el recorrido?"
"Sí", respondí. "A menos que sepa algo que yo no."
"Ok", se rió y volvió a mirar a los CD.
"Bueno", pensé, "todo transcurrió sin problemas." Sin embargo, en secreto, pensé que fue completamente satisfactoria.
Más tarde me enteré que él sabía exactamente quién era yo porque él había preguntado, "¿Quién es la muchacha negra?" Por supuesto, con el paso del tiempo fue mucho más cómodo para mí estar cerca de él.
Cuando los fans pedían al Rey del pop si podían conseguir un autógrafo o tomarse una foto con él, de vez en cuando decía: "Si está bien para ella", señalándome a mí.
Siempre estaba bien para mí. ¿Quién iba a romper el corazón de un fan?
Cuando se supo la noticia acerca del fallecimiento de MJ, todos los recuerdos de la gira llegaron de golpe. Como la noche que se casó con Debbie Rowe y no pude dormir durante dos días, debido a las llamadas de los medios de comunicación sin fin. Me pegué a la respuesta partidista: "No tengo ningún comentario sobre la vida personal del señor Jackson".
Ser parte del séquito de Jackson fue fascinante y revelador. Llegué a ver el funcionamiento interno de una superestrella, multifacético y preciso como una máquina. Siempre estaba de guardia y tenía que estar lista para acompañar a MJ de un momento a otro - o podía quedar atrás. Eso no se siente bien.
Se hizo evidente, desde el principio, que si bien a veces era de voz suave, era de carácter fuerte y muy directo cuando quería puntualizar algo.
En las noches de concierto, me gustaba ver como MJ caminaba desde su coche a un punto debajo del escenario donde una plataforma lo elevaría en condiciones de hacer una entrada de gran impacto.
La parte favorita de mi trabajo era estar de pie al costado, noche tras noche, viéndolo actuar con precisión y pensando en lo bendecida que fui al poder observar a un maestro- artesano en el trabajo.
Porque él tenía una presencia imponente, creo que la gente se olvidaba de que era un hombre. Ha sido elevado a la categoría de superestrella durante tanto tiempo, es difícil para algunos verlo como un ser humano.
Lo vi en esos momentos, pensativo, tranquilo antes de salir al escenario. Fui testigo de él , sin cámaras de televisión, sentarse, reconfortando y hablando con un niño que estaba luchando contra una enfermedad grave en un hospital. Este es el tipo que, en acción de gracias en Australia, pensaba que era lo suficientemente importante venir a compartir una comida y celebrar con su personal y la tripulación.
Cuando se trata de Jackson, sólo puedo hablar de mi propia verdad. El Jackson que llegué a conocer fue amable y respetuoso conmigo. Y, en esas ocasiones cuando me llamó la atención, me dio esa sonrisa tímida e infantil.
La siguiente cita de "Romeo y Julieta " de Shakespeare fue leída reciéntemente en memoria de un amigo. Creo que es más apropiada para MJ.
"Y cuando él muera, lo llevarán y cortarán en pequeñas estrellas, y con él harán el rostro de los cielos, tan bien que todo el mundo va a estar enamorado de la noche y no rendirán más el culto al sol."
En agradecimiento, le digo gracias, Michael Jackson. Gracias por la magia, la música y los recuerdos suficientes que mantendré toda la vida. - Darlene ("The black girl") "
Darlene Donloe with Michael Jackson... Notes on the King of Pop from the memory of a one-time tour publicist."I have never written about the brief relationship I had with Michael Jackson.
But, upon learning of his untimely death last week, I felt compelled to offer a different perspective on the Jackson I knew.
I don't need to tell you he was a genius. I don't need to tell you the impact he had on the music industry or that he was loved throughout the world.
In the spirit of full disclosure, I have nothing bad to say about Jackson. In fact, it's just the opposite. He gave me some of the most unforgettable moments of my life. And, for that, I will be forever grateful.
It was the summer of 1996 when my friend, Bob Jones (now deceased), who happened to be Jackson's publicist at Motown and then later with MJJ Productions, called me and asked what I was doing for the next six months.
He said: "How would you like to go out on tour with Michael? He needs a tour publicist."
I held the phone in disbelief as Bob continued his spiel. What did he expect me to say? "Well, Bob, I'll have to look at my schedule. Let me get back to you." Why would I want to fly around first class on a private plane for a Michael Jackson tour, visit exotic places, meet officials, eat great food and stay in five star hotels? I said yes. Duh!
About three weeks later, I was on a plane that landed in Prague, Czech Republic, the first stop on MJ's worldwide HIStory Tour.
It was a week into the tour before I officially met Jackson. Although I had accompanied him on many of his outings, no one had bothered to formally introduce us.
His handlers had warned me not to speak to the King of Pop unless he first spoke to me. Were they kidding? I played along — for about a week.
I decided the next time I accompanied him to either a hospital, orphanage or record store, I would make my ninja move. I figured the worse that could happen would be that I would get sent home.
As he perused the compact discs in the R&B section of a local record store, I started to walk toward him. The handlers were aghast. It was as if the air had quickly been sucked out of the room. Undeterred, I walked up to him and said, "Mr. Jackson, I'm Darlene. I'm your publicist on the tour."
He turned and looked me straight in the eyes. "Oh, OK," he said. "Are you going to do the whole tour?"
"Yes," I replied. "Unless you know something I don't."
"OK," he laughed and returned to looking through the CDs.
"Well," I thought, "that was uneventful." However, secretly, it was completely fulfilling.
I found out later he knew exactly who I was because he had asked, "who is the black girl?" Of course, as time went on he became more comfortable with my close proximity to him.
When fans asked the King of Pop whether they could get an autograph or take a picture with him, he'd occasionally say, "If it's OK with her," pointing to me.
It was always OK with me. Who was I to break a fan's heart?
When news broke about MJ's passing, all of the memories of the tour came flooding back. There was the night he married Debbie Rowe and I got no sleep for two days, due to endless media calls. I stuck to the party-line answer: "I have no comment on Mr. Jackson's personal life."
Being a part of Jackson's entourage was fascinating and eye-opening. I got to see the inner workings of a superstar's multifaceted, precision-like machine. I was always on call and had to be ready to accompany MJ at a moment's notice — or I'd be left behind. That wouldn't sit well.
It became clear, early on, that while he was sometimes soft-spoken, he was strong-willed and very direct when he wanted to make a point or have something done.
On concert nights, I'd watch as MJ walked from his car to a spot underneath the stage where a platform would eventually elevate him into position to make a powerful entrance.
The favorite part of my job was standing in the wings night after night, watching him hit every mark with precision and thinking how blessed I was to observe a master craftsman at work.
Because he had such a commanding presence, I think people forgot he was a man. He's been elevated to superstar status for so long, it's hard for some to look at him as a human being who puts his pants on one leg at a time.
I saw him in those pensive, quiet moments before going on stage. I witnessed him, sans television cameras, sitting, comforting and talking to a child in a hospital who was fighting a serious disease. This is the guy who, on Thanksgiving in Australia, thought it was important enough to come share a meal and celebrate with his staff and crew.
When it comes to Jackson, I can only speak my own truth. The Jackson I came to know was friendly and respectful to me. And, on those occasions when I caught his eye, he would give me that shy, childlike smile.
The following quote from Shakespeare's "Romeo and Juliet" was read recently at a friend's memorial. I think it's more than appropriate for Jackson.
"And, when he shall die, take him and cut him out in little stars, and he will make the face of Heaven so fine that all the world will be in love with night and pay no worship to the garish sun."
In gratitude, I say thank you, Michael Jackson. Thanks for the magic, the music and enough memories to hold me a lifetime. — Darlene (the black girl)"
TRADUCCIÓN:
El Michael Jackson que yo conocí...
Darlene Donloe con Michael Jackson ... Notas sobre el Rey del pop a la memoria de una publicista de la gira History.
"Nunca he escrito acerca de la breve relación que tuve con Michael Jackson.
Pero, al enterarme de su muerte la semana pasada, me sentí obligada a ofrecer una perspectiva diferente del Michael Jackson que yo conocí.
No necesito decirles que era un genio. No necesito decirles el impacto que tuvo sobre la industria de la música o que era amado en todo el mundo.
No tengo nada malo que decir acerca de Jackson. De hecho, es todo lo contrario. Me dio algunos de los momentos más inolvidables de mi vida. Y, por eso, voy a estar eternamente agradecida.
Era el verano de 1996, cuando mi amigo, Bob Jones (ya fallecido), quien pasó a ser el publicista de Jackson en la Motown y más tarde con MJJ Productions, me llamó y me preguntó qué estaría haciendo en los próximos seis meses.
Él dijo: "¿Te gustaría ir de gira con Michael ? Él necesita un publicista de gira".
Yo sostenía el teléfono con incredulidad y Bob continuó su perorata. ¿Qué esperaba que dijera? "Bueno, Bob, voy a tener que mirar a mi agenda. Permíteme, ya vuelvo contigo." ¿Por qué iba yo a querer volar en primera clase en un avión privado para una gira de Michael Jackson, visitar lugares exóticos, reunirse con funcionarios, comer buena comida y hospedarme en hoteles de cinco estrellas? Le dije que ¡Sí!. Duh!
Unas tres semanas más tarde, estaba en un avión que aterrizó en Praga, República Checa, la primera parada de su gira mundial History.
Pasó una semana en la gira antes de que oficialmente conociera a Jackson. A pesar de que lo había acompañado en muchas de sus salidas, nadie se había molestado en presentarnos formalmente.
Sus controladores me habían advertido, que no hablara con el Rey del pop a menos que primero me hablara él. ¿Me estaban tomando el pelo? Eso hice alrededor de una semana.
Decidí que la próxima vez que lo acompañara a la tienda o un hospital, orfanato o grabar, me gustaría hacer "mi movimiento ninja". Me imaginé que lo peor que podría suceder sería que me mandaran a casa.
A medida que examinaba los discos compactos en la sección de R & B de una tienda de discos, empecé a caminar hacia él. Los controladores se horrorizaron. Era como si el aire hubiera sido rápidamente absorbido de la habitación. Sin inmutarme, me acerqué a él y le dije: "Señor Jackson, soy Darlene. Yo soy su publicista en la gira."
Se volvió y me miró fijamente a los ojos. "Oh, bien", dijo. "¿Vas a hacer todo el recorrido?"
"Sí", respondí. "A menos que sepa algo que yo no."
"Ok", se rió y volvió a mirar a los CD.
"Bueno", pensé, "todo transcurrió sin problemas." Sin embargo, en secreto, pensé que fue completamente satisfactoria.
Más tarde me enteré que él sabía exactamente quién era yo porque él había preguntado, "¿Quién es la muchacha negra?" Por supuesto, con el paso del tiempo fue mucho más cómodo para mí estar cerca de él.
Cuando los fans pedían al Rey del pop si podían conseguir un autógrafo o tomarse una foto con él, de vez en cuando decía: "Si está bien para ella", señalándome a mí.
Siempre estaba bien para mí. ¿Quién iba a romper el corazón de un fan?
Cuando se supo la noticia acerca del fallecimiento de MJ, todos los recuerdos de la gira llegaron de golpe. Como la noche que se casó con Debbie Rowe y no pude dormir durante dos días, debido a las llamadas de los medios de comunicación sin fin. Me pegué a la respuesta partidista: "No tengo ningún comentario sobre la vida personal del señor Jackson".
Ser parte del séquito de Jackson fue fascinante y revelador. Llegué a ver el funcionamiento interno de una superestrella, multifacético y preciso como una máquina. Siempre estaba de guardia y tenía que estar lista para acompañar a MJ de un momento a otro - o podía quedar atrás. Eso no se siente bien.
Se hizo evidente, desde el principio, que si bien a veces era de voz suave, era de carácter fuerte y muy directo cuando quería puntualizar algo.
En las noches de concierto, me gustaba ver como MJ caminaba desde su coche a un punto debajo del escenario donde una plataforma lo elevaría en condiciones de hacer una entrada de gran impacto.
La parte favorita de mi trabajo era estar de pie al costado, noche tras noche, viéndolo actuar con precisión y pensando en lo bendecida que fui al poder observar a un maestro- artesano en el trabajo.
Porque él tenía una presencia imponente, creo que la gente se olvidaba de que era un hombre. Ha sido elevado a la categoría de superestrella durante tanto tiempo, es difícil para algunos verlo como un ser humano.
Lo vi en esos momentos, pensativo, tranquilo antes de salir al escenario. Fui testigo de él , sin cámaras de televisión, sentarse, reconfortando y hablando con un niño que estaba luchando contra una enfermedad grave en un hospital. Este es el tipo que, en acción de gracias en Australia, pensaba que era lo suficientemente importante venir a compartir una comida y celebrar con su personal y la tripulación.
Cuando se trata de Jackson, sólo puedo hablar de mi propia verdad. El Jackson que llegué a conocer fue amable y respetuoso conmigo. Y, en esas ocasiones cuando me llamó la atención, me dio esa sonrisa tímida e infantil.
La siguiente cita de "Romeo y Julieta " de Shakespeare fue leída reciéntemente en memoria de un amigo. Creo que es más apropiada para MJ.
"Y cuando él muera, lo llevarán y cortarán en pequeñas estrellas, y con él harán el rostro de los cielos, tan bien que todo el mundo va a estar enamorado de la noche y no rendirán más el culto al sol."
En agradecimiento, le digo gracias, Michael Jackson. Gracias por la magia, la música y los recuerdos suficientes que mantendré toda la vida. - Darlene ("The black girl") "
ADMIN-DULCE para Foros Just for girls.
http://justforgirls.argentina-foro.net/t743-fotos-con-historia-poupurrie#23223
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